LA ESPECIE MAS NOCIVA DE LA TIERRA
Me río por
no llorar, cuando los judíos afirman que son la especie elegida. Si el Homo
sapiens no hubiese eliminado a nuestros antecesores, yo diría que la especie
elegida debió de ser la neandertal, hechos que la biblia ha sabido disimular
muy bien representados por Caín y Abel, lógico de las dos especies
sobrevivió la de Caín.
A
nosotros como dije una vez nos cuadra mas lo de “especie asesina” y no hace
falta recurrir a las hemerotecas para constatar que ha batido récords escalofriantes
que nos hacen merecedores de tal calificativo.
Solo como ejemplo:
Saben que
el homo sapiens ha extinguido a miles de otras especies animales y esta a
un paso de acabar con miles más.
Saben que
ha desarrollado una civilización cuya agresión a la naturaleza es tan
terrible que amenaza con degenerarla de forma irreversible.
Que su
violencia no va solamente dirigida contra el resto de otras especies, sino
que, con inusitada crueldad la dirige contra sus propios congéneres.
Que ha
manipulado virus y bacterias que pueden acabar con buena parte de la población
humana.
Que ha
creado y almacenado armas nucleares de destrucción masiva, capaces de
destruir la Tierra 8 veces seguidas.
Que antes
se utilizaba la guerra para restituir derechos perdidos o para evitar
estados de injusticias y miserias, y ahora la guerra se utiliza
como negocio.
Que antes
los cargos públicos consideraban a la política como una vocación para
preocuparse de las necesidades del pueblo y ayudarles a mejorar su vida, y
ahora consideran a la política como un negocio y son fácilmente accesibles a
amoldarse a las necesidades de empresarios, especuladores inmobiliarios o
multinacionales que utilizan el mercado libre para enriquecerse.
Que hubo
un tiempo (corto, la verdad) en que la grandeza del hombre estaba representada
en sus valores, principios y sabiduría, y hoy el único valor que da grandeza al
hombre es el dinero.
Que antes
el bien más preciado era la libertad, hoy el bien más preciado es el poder de
las armas.
Que los
científicos ya no ponen su talento al servicio de la humanidad para mejorar su
existencia, sino al servicio de las grandes potencias que lo usan para
imponerse a las demás.
Que en la
lucha del bien contra el mal, siempre es el pueblo quien pone los
muertos, mientras que el poderoso sale siempre indemne y así el mal prevalece,
para masacrar al más débil.
Satán
sigue estando donde estaba, pero este enemigo nª uno de la humanidad ha
descendido a segundo puesto, ahora su lugar, el numero uno lo ocupa el
homo sapiens