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domingo, octubre 12, 2014

ESTAMOS HARTOS

LA POLÍTICA QUE NOS INDIGNA, ANTAGONISTA DE LOS CIUDADANOS, QUE NOS ASQUEA, NOS CABREA Y NOS DECEPCIONA

Si, los ciudadanos estamos hartos, hartos de que la política partidista que beneficia a una élite económica, excluya a una mayoría que configuran  las clases más desfavorecidas.

Hartos de que tengamos que pagar una deuda ilegítima, por tanto ilegal y odiosa que recae sobre los hombros de los trabajadores, funcionarios y pensionistas.

Hartos de que se ningunee la Constitución que reconoce el derecho a una vivienda y se permita a la Banca que ha sido rescatada, defendida y respaldada por los gobiernos de turno, pero  que continua  con los desahucios,  dejando a miles de familias mensualmente en la calle, totalmente desamparados, sin casa pero con la deuda pendiente.

Hartos de que se siga alabando la brutal y agresiva reforma laboral que ha convertido a los trabajadores en parias con contratos basura y salarios de miseria.

Hartos de que consejeros, directivos y altos cargos de entidades y grandes empresas financieras como Bankia, llevaran utilizando las tarjetas fantasma, cuyos gastos no estaban controlados ni por el Banco de España ni por Hacienda cuando se supone que estaba en conocimiento de todo el estamento empresarial y político, cuando dichas tarjetas nunca se utilizaron para gastos de representación, sino en caprichos personales totalmente privados como restaurantes , joyas, vinos, hoteles, supermercados ropa, clubs... o viajes, algo que se continuó haciendo despues de rescatar a Bankia con dinero público. Totalmente repugnante, vergonzoso y deshonesto que merece un castigo ejemplar, máxime cuanto se consumo la gran estafa por parte de esta entidad con las preferentes.

Hartos de que los recortes e impuestos estén llevando a la pobreza a millones de familias, deteriorando los servicios públicos y desmantelando el estado del bienestar.

Hartos de que políticos, portavoces y periodistas de prensa amarilla, sigan induciéndonos de forma solapada a oir sus mentiras, sus incoherencias y sus sandeces.

Hartos de que se desahoguen  y justifiquen ante los ciudadanos diciendo que hay que condenar a los corruptos y la corrupción de forma acuciante y eficaz, pero que nunca lo hagan, por el simple  hecho de que ellos mismos están imputados y otros condenados pidiendo el indulto que les permite el no ingresar en la cárcel, ni devolver lo robado.

Hartos de que los jueces que investigan a los corruptos sean condenados y apartados de la judicatura, por descubrir la verdad delictiva de los todopoderosos, sin que estos hayan sido condenados, expropiados y encarcelados.

Hartos de que los magistrados y jueces del alto tribunal y otros no tan altos, sean puestos a dedo por los políticos, que nunca ejercerán una justicia imparcial, ya que que están atados y condicionados por sus respectivos partidos.

Hartos de que este país haya eliminado la educación y la sanidad como un derecho social y universal en favor de las élites económicas y pudientes,  transformándose poco a poco en un servicio que ya no es un derecho sino una cuestión de dinero, de tal forma que solo tendrá acceso a una educación el que se la pueda costear y a una sanidad para el que la pueda pagar.

Hartos de que no se acabe con el, mangoneo, saqueo y despilfarro de las administraciones públicas, locales y autonómicas, permitiendo la libre disposición del dinero procedente de los impuestos pagados por los ciudadanos, sobre los que no se impone control alguno con un neoliberalismo que raya en la irresponsabilidad.

Hartos de que se mantengan instituciones del estado totalmente obsoletas y prescindibles, con sus cientos de puestos nombrados a dedo con sueldos millonarios, mientras se les exige sacrificios al resto del pueblo.

Hartos de que no se impongan las políticas laborales adecuadas para acabar con la lacra del paro que ya afecta a 6 millones de personas, de las cuales más de 2 millones no llevan ingreso alguno a sus hogares.

Hartos que de que se elaboren leyes represivas para evitar las protestas ante tanto abuso y tantas injusticias.

Hartos de que se siga haciendo de la político un negocio donde enriquecerse o medrar para una mejor poltrona, obviando el sagrado y obligado deber de servir a los ciudadanos.

Hartos de que la corrupción se haya generalizado en nuestras instituciones públicas y de que los corruptos se pavoneen y presuman de su impunidad, algunos de ellos de haber expulsado a los jueces que los investigaban ( Garzón por el caso Gurtel y Elpidio por Blesa).

Hartos de que mientras los señores diputados, ministros y senadores se suben el sueldo y utilizan las puertas giratorias por los favores realizados,  se congele el sueldo a los funcionarios y se  sigan manteniendo las pensiones por debajo del umbral de la pobreza.

Hartos de la exclusión y marginación de la que son objeto mas de 2 millones de personas que han perdido su tarjeta sanitaria al perder su empleo a los que se les excluye de integrarse dignamente en la sociedad.

Hartos de que las políticas del gobierno permitan que más de un millón de jóvenes(el 57%) sigan sin posibilidad de encontrar un puesto de trabajo, obligando a mas de 400.000 a emigrar al extranjero, muchos de ellos licenciados con máster y doctorado.

Hartos de que se haya generalizado la pobreza como algo natural, con más de 2 millones de personas que no reciben prestación alguna, haciendo que más de 750.000 niños sufran la hambruna en la España del siglo XXI, que parece haber retrocedido al siglo XIX.

Hartos de que esa precariedad en el trabajo obligue a  muchos  desempleados a aceptar ofertas de trabajo que ofenden la dignidad de los seres humanos, con jornadas intensivas y salarios por debajo del SMI.

Hartos de que los recortes estén reduciendo nuestros servicios públicos al mínimo con unas carencias que están afectando directamente a los ciudadanos como es el caso de la sanidad, donde se han eliminado más de 52.000 profesionales y recortado el gasto sanitario en más de un 30%.

Hartos de que se recorte en la educación pública, eliminado becas, apoyando a los colegios privados y concertados, mientras se reducen los colegios públicos, donde se han llegado a despedir desde el 2012 a más de 50.000 profesores de enseñanza primaria y secundaria.

Hartos de que mientras los ricos siguen aumentando su patrimonio y acumulan riqueza de forma deshonesta (en el año 2013 hubo 4000 nuevos millonarios a costa de los ciudadanos, la pobreza siga imparable(2 millones más de pobres en los últimos 2 años con el Gobierno de Rajoy).

Hartos del total desprecio de los gobernantes hacia el pueblo humilde, de su cinismo al que mientes descaradamente e insultan su inteligencia tomándonos por pardillos y analfabetos políticos, un pueblo que está muy cansado del espolio de los bancos y banqueros(tarjetas negras, sobresueldos, etc.).

Y hartos de la privatización de las ganancias pero la socialización de las deudas.

 Un pueblo harto y decepcionado de que no surja un líder valiente, honesto y capaz de formar en España   un Estado verdaderamente libre, social, justo y legítimo.

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